Pánico escénico
![](https://static.wixstatic.com/media/fa3b6f_799c3fe0e93d4576893bf9cc3967b881.jpg/v1/fill/w_188,h_171,al_c,q_80,enc_avif,quality_auto/fa3b6f_799c3fe0e93d4576893bf9cc3967b881.jpg)
Muchos sufren de esto y no saben cómo confrontarlo la ansiedad se apodera de algunos y los lleva por decirlo así a hacer el “ ridículo “ a no poder decir o hacer las cosas cuando saben que tienen mucho que dar o decir , a causa de esto empiezan a cerrarse mucho a las personas por miedo y por pensar que las cosas les van a salir mal y que se van a burlar de ellos pierden la seguridad y se sienten incómodos con sigo mismos otra causa es que se presentan síntomas a nivel psicológico y físico sudar, dan ganas de ir al baño, se sonrojansonrojan, da escalofríos e incluso tartamudean por no saber cómo actuar y enfrentarse al público. Un no puedo, un no soy capaz o un no soy bueno para eso es la clave perfecta para estancarse y hacer que todo lo malo pase de verdad, esto no solo afecta cuando uno se expresa al público sino que también pasa cuando le vas a hablar a la persona que te gusta o cuando quieres comenzar una conversación interesante; muchas veces nosotros mismos somos quienes nos juzgamos y nos criticamos y hacemos que nuestras cualidades se vuelvan negativas empezamos a expresarnos con nuestro cuerpo de manera que damos a entender a los demás nuestra inseguridad y desconfianza.
Tratar de ignorar el miedo no es tan bueno pues esto causa más miedo y una autocrítica mucho mayor que genera más dificultades, enfrentarse al pánico escénico o al miedo lleva su trabajo, hay que aprender a controlar nuestras emociones, sentimientos e inseguridades y no dejar que estas tomen autoridad sobre nosotros sino más bien nosotros tomar autoridad sobre ellas. Leer más e informarse sobre las cosas que nos gustan ya sea arte, música, literatura y sobre el mundo hace parte del trabajo que se requiere para perder la inseguridad y el miedo al “ridículo“ porque de esta forma las personas van a tener una mayor capacidad para expresarse y poder compartir opiniones o ideas que esta misma se plantee, poder criticar, opinar y decir lo que se piensa sobre cualquier tema, no está mal sentir miedo pero tampoco está bien quedarse callado.